Tras la revelación del Vacunatorio VIP en el Ministerio de Salud de la Nación y el Hospital Posadas, y habiendo transcurrido casi una semana desde entonces, sigue habiendo más dudas que certezas, quizás porque pretenden intentar explicar lo inexplicable en lugar de asumir la responsabilidad y reconocer que, efectivamente, se privilegió a algunos ciudadanos en desmedro de otros.

Esta realidad lo único que hace es arrojar más dudas sobre la situación, porque expone, de la manera más cruda, la imposibilidad de ocultar una realidad inocultable. Aún debe determinarlo la justicia, pero parece innegable que el sistema transparente y democrático de asignación de vacunas no fue tal, de hecho el propio gobernador Kicillof reconoció públicamente que ‘La verdad es que no tenemos en cada uno de los vacunatorios un sistema de control para ver eso’, y que como se señala en el artículo de INFOBAE, ‘en algunos casos se aplicaron cuatro y que para no desechar la quinta “después se le aplicó a un bombero o un policía” a pesar de no integrar los grupos prioritarios. Sin embargo, también reconoció que “puede haber otros casos más sofisticados, con el acuerdo del centro de vacunación; o por amiguismo y acomodo”’. Aunque por las declaraciones no lo parezca Kicillof es el gobernador de la Provincia de Buenos Aires.

Por eso es importante aportar certezas a una realidad que no las tiene, porque esto redundará en una mejor calidad democrática. Cuando las cosas no están claras, las consecuencias las pagamos todos. ¿Qué ocurrió en Zárate? ¿Hubo vacunados VIP?

En una conferencia de prensa brindada por el Secretario de Salud y el Presidente del Concejo Deliberante para explicar la vacunación del Intendente Osvaldo Cáffaro quedó en claro que nada está claro, se argumentó que figuraba como personal de salud, aunque no todos los vacunados por la misma época figuran registrados de igual manera, lo cual invalida el argumento, y no pudieron explicar por qué la diferencia de fechas entre la que dice el Intendente haberse vacunado y la que figura en el sistema. De hecho no queda claro por qué no estaba el Intendente dando las explicaciones del caso.

Pero como en la circunstancia que expuso de manera descarnada la supervivencia de la mala política que se dice querer combatir, a nivel local también hay explicaciones para dar y dudas que evacuar.

¿Es cierto que el 27 de enero, el mismo día que el registro oficial exhibe que se vacunó el Intendente, se vacunó la Secretaria Privada del Intendente Municipal Lilian Burroni?

Si esto es cierto, ¿Por qué se vacunó pese a no pertenecer a los establecidos grupos de riesgo? ¿Gozó de un turno otorgado por el sistema provincial?

¿Es cierto que fue registrada como personal de Cuidados Intensivos?

Es cierto que también fue inscripto como personal de salud días antes, el 13 de enero, el Secretario de Políticas de Juventudes Rodrigo Girard, quien incluso publicitó en las redes sociales cuando le aplicaron la segunda dosis.

¿A él lo turnaron desde la Provincia?

No dudamos de la honorabilidad de la concejal licenciada del Frente de Todos, que solo participó de la sesión constitutiva y de aquella donde se decidió la compra del terreno de Concaro, y del joven Secretario, seguramente podrán explicar su situación y lo harán inmediatamente para despejar toda sospecha.

Deben explicaciones.